Teniendo en cuenta datos provenientes de diferentes fuentes, las previsiones para la economía española en junio de 2020, muestran que no habrá recuperación hasta 2022. Hasta entonces la producción no alcanzará el nivel anterior a la pandemia.
Como la mayoría de los países afectados por la pandemia, se espera que España esté al cierre de 2021 por debajo de las cifras del final de 2019, sobre todo teniendo en cuenta que nuestro país es uno de los más afectados por el virus y que ha sufrido uno de los confinamientos más duros. La recuperación será desigual por sectores. Por ello, de las diferentes teorías sobre la recuperación, las previsiones apuntan más a una curva en ✔ o en L que a una en U, a pesar de la opinión de la mayor parte de los ejecutivos encuestados por EY. El horizonte de pronóstico es 2022, es decir, el tiempo de recuperación previsto en este momento es de dos años.
El Banco de España rectificó su predicción de abril, que auguraba una caída del PIB de entre el 6,6 y el 13,6% en 2020, considerando poco realistas escenarios más benignos, ya que la duración de las restricciones ha sido mayor de lo anticipado. Aunque sí mantiene la curva de recuperación en ✔ del PIB real, teniendo en cuenta que en 2022 solo se habría recuperado el 95% del PIB de 2019.
La Comisión Europea pasó de unas previsiones de crecimiento del PIB Español del 1,6% para 2020 (similares a las de la OCDE y el FMI), por encima de la media europea (1,4%), a prever un desplome del 9,4% como consecuencia de la COVID-19. Se trata de la mayor caída del PIB español desde la Guerra Civil. De esta forma, España se sitúa entre los tres países europeos más afectados por la crisis sanitaria, junto con Grecia e Italia, para las que el desplome es respectivamente de 9,7% y de 9,5% de su PIB, frente a una media europea del 7,7%. La curva de recuperación a nivel europeo y la de la economía española tienen forma de ✔. Si bien en el caso de la española es más abierta y prolongada que la de la media.
Además, las previsiones del FMI y las últimas previsiones del Gobierno español recogidas en el Programa de Estabilidad remitido a Bruselas, presentan números bastante similares, destacando que para este último el déficit quedará ligeramente por debajo del de 2012 (10,7%) y la deuda pasará del 95,5% al 115,5% del PIB. El objetivo es que la curva de recuperación se acerque más a la ✔ que a la L. Otras fuentes coinciden con que la curva de recuperación de la economía española será en ✔, aunque la prolongación en el tiempo y el grado de apertura varían ligeramente.
La contracción del PIB mundial en 2020 se sitúa en el 3%, según el FMI, considerándose la peor recesión desde la Gran Depresión. Se prevé un rebote de actividad en 2021 del 5,8%, siempre que la virulencia de la pandemia se haya apagado para la segunda mitad del año.
De un déficit del 2,8% debido a los aumentos en las pensiones y en los salarios del sector público en 2019, la Comisión Europea eleva el déficit español al 10,1% en 2020. La tasa de paro, sin contabilizar los ERTE, se dispara al 18,9%, mientras se calcula una deuda del 115,6% del PIB. Para 2021 Bruselas prevé un rebote del 7% del PIB, con una media europea del 6,3% y un recorte del déficit español hasta el 6,7%. Además de pequeñas mejoras en el paro y la deuda, con un 17% y un 113,7%, respectivamente.
