Emprender no es un camino fácil ni desde luego barato. Esta afirmación, tan extendida entre aquellos que han puesto en marcha su negocio, comienza desde el mismo momento en el que se constituye la sociedad o con el alta en autónomos, cuando iniciaremos una relación a largo plazo con nuestros clientes, los proveedores y, por supuesto, con las administraciones públicas.
Pero ¿cuánto cuesta empezar a emprender? La respuesta depende de si nos damos de alta como sociedad o como autónomo. En cualquier caso, hay una serie de costes que todos deberíamos tener claros antes de echar a andar, porque el primer año puede marcar la diferencia.