Invertir en pareja: ¿es realmente buena idea? | EDE
movi-image-20minutos-invertir-pareja-1
Envíanos sugerencias
Ahorro e Inversiones
3 min de tu tiempo

Invertir en pareja: ¿es realmente buena idea?

12/02/2020

La compra de una vivienda es la forma más común de inversión en pareja, aunque existen otros productos financieros de gran interés. La gran ventaja es que la aportación es doble; el inconveniente, qué ocurre con el dinero si hay una separación

Comprar una casa, ahorrar para disfrutar de una jubilación sin preocupaciones o reservar algo de dinero mensualmente para realizar un gran viaje son algunas de las cosas que muchas personas se plantean con gran ilusión a lo largo de su vida. Para una gran mayoría, las ganas son todavía mayores si estos planes se hacen en compañía de otra persona.

Invertir en pareja es un asunto complicado, pues la manera en la que cada uno gestiona el dinero es muy personal. No obstante, tiene ciertas ventajas, ya que la aportación es doble y la declaración y cuestiones fiscales quedan repartidas. Desde el Consejo General de Economistas de España apuntan que a la hora de contratar instrumentos financieros de cierta complejidad es fundamental “acudir a una Empresa de Asesoramiento Financiero, inscrita la CNMV, quien de forma objetiva e independiente, y con los conocimientos y experiencia acreditados, puede hacer recomendaciones de inversión adecuadas e idóneas para el inversor”.

Puede interesarte: Ahorrar en pareja: los cinco errores más frecuentes

La forma más común de invertir es a través de una cuenta corriente conjunta, que permite compartir gastos y también ahorrar algo de dinero. No obstante, la rentabilidad y el interés de este producto es muy baja, por lo que, si de verdad se quiere invertir y ahorrar, existen otras fórmulas más interesantes, como la vivienda, los fondos de inversión, los planes de pensiones o la inversión en sociedades.

En qué invertir en pareja

Según el informe 'Perfil del comprador de una vivienda 2018', elaborado por la Sociedad de Tasación, un 32% de los compradores de una vivienda lo hacen porque han decidido casarse o vivir con su pareja, lo que convierte a esta transacción en otra de las opciones más frecuentes para invertir. Adquirir una casa en común permite compartir los gastos de hipoteca y también beneficiarse de la deducción por vivienda habitual en la declaración de la renta, que puede hacerse compartida o individual según beneficie más a la economía de la pareja.

Puede interesarte: Separación e hipoteca, ¿cómo gestionarlo?

Además del mercado inmobiliario, también se puede invertir en sociedades, con acciones o participaciones en empresas, pues aportan beneficios cada cierto tiempo. No obstante, estos son menos rentables fiscalmente que otros productos.

En los fondos de inversión, por ejemplo, pueden participar varias personas y son flexibles a la hora de recuperar la inversión, mientras que los planes de ahorro, productos a largo plazo, dan una gran rentabilidad. En cualquier caso, si se está pensando en invertir, lo mejor es acudir a tu asesor o entidad bancaria que recomiende la mejor opción en función de la capacidad económica y el perfil inversor de la pareja.

Puede interesarte: Descubre tu perfil inversor aquí

Desde el Consejo de Economistas apuntan también que antes de realizar cualquier inversión, es importante tener en cuenta "la planificación financiera, la información sobre el producto (riesgos, gastos, rentabilidad) y la información de la entidad financiera en la que materializar las inversiones (solvencia, comisiones y gastos)”. “Las rentabilidades pasadas no garantizan rentabilidades futuras y hay productos con una alta volatilidad que hacen que su valoración varíe diariamente”, añaden.

A tener en cuenta

Ya sea una cuenta corriente o un fondo de inversión, antes de contratar un producto financiero en pareja es importante concretar con la entidad bancaria que se contrate qué ocurrirá en caso de que haya una separación, para saber cómo se cancelará dicho producto o cómo se repartirá el dinero invertido.

En el caso de una vivienda, por ejemplo, la ley en España establece que los miembros deben asumir el 50% del coste de la hipoteca si no se ha concretado otra condición previa en caso de divorcio. Respecto a los planes de ahorro, estos no se consideran como liquidez si no han pasado más de 10 años, por lo que aunque el Código Civil establece el reparto de bienes y de una pensión compensatoria si no hay una separación de bienes previa, el dinero acumulado no se podrá repartir hasta que el plan se pueda recuperar. En caso de querer rescatar la inversión antes, habría que pagar la penalización estipulada en las condiciones del mismo. 

Fotografía de Martino Pietropolo en Unsplash
-Temas relacionados-
up