Hace un año, el Consejo Europeo aprobó la creación del Fondo de Recuperación Europeo, también conocido como Next Generation EU, el mayor instrumento de estímulo económico financiado por la Unión Europea (UE) hasta la fecha. Recientemente, la Comisión Europea ha dado el visto bueno al Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) presentado por el Gobierno para repartir los alrededor de 140.000 millones de euros asignados a España.
El Fondo de Recuperación Europeo pretende contribuir a la transformación de la economía española a través de diferentes líneas de actuación y planes de inversión. José Manuel Pedregal, director del Segmento de Pymes y Empresas de Banco Sabadell, explica en el Podcast de Banco Sabadell que “el dinero que se va a recibir busca la transformación de la economía para hacerla más resiliente y respetuosa con el medioambiente. Los fondos ayudarán a las empresas en su transformación con líneas en digitalización, sostenibilidad, conectividad, desarrollo del 5G, movilidad... Todo lo que requiere ahora España para su transición económica está cubierto por estas ayudas”.
Sin embargo, el Director del Segmento de Pymes y Empresas de Banco Sabadell advierte de que estas ayudas no están exentas del cumplimiento de unos objetivos y “requieren por parte de las empresas transformación y también inversión".
Proyectos con un impacto duradero en la economía
España espera recibir en torno a 69.500 millones de euros de Europa con los que se impulsarán proyectos que tengan un impacto duradero en la economía, en la competitividad, en el empleo y en la sociedad en general. En este marco, el Gobierno aprobó en marzo una línea de ayudas destinadas a las empresas y a los autónomos en los que más ha impactado la pandemia. "Una cosa son los fondos europeos destinados a la transformación y otra las ayudas directas que buscan restablecer la solvencia de las empresas y de los autónomos que se han visto afectados por la COVID-19 y que están dotadas con 7.000 millones de euros”, explica Pedregal. “La empresa no tiene que abordar un nuevo proyecto, sino demostrar que ha sufrido una caída de su facturación en el año 2020 de, al menos, un 30% con respecto a 2019", añade.
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Las ayudas directas van destinadas a restablecer la solvencia, sobre todo, del comercio minorista y de la industria del turismo, que han sido de los sectores más afectados por la crisis derivada de la COVID-19. Las comunidades autónomas son las encargadas de canalizar este dinero y cada una ajusta la lista de actividades económicas susceptibles de recibir estas ayudas, pudiendo añadir otras ramas a las 95 fijadas por el Gobierno, en función de la idiosincrasia de cada región.
Los receptores de las ayudas procedentes del Fondo de Recuperación Europeo no tendrán que devolverlas, son a fondo perdido, pero para ello, puntualiza Pedregal, "la empresa tiene que cumplir los requisitos para solicitarlas y no puede emplear el dinero en lo que quiera sino destinarlo al pago de proveedores o a saldar deudas”, entre otros gastos. “Para optar a este subsidio las compañías deben estar al día con sus obligaciones de pago, ya que el plan de estímulo tiene carácter finalista, es decir, está destinado a hacer frente a gastos referentes a salarios, alquileres, disminución de deuda financiera y pagos a proveedores. Se trata de restaurar la solvencia de las empresas saldando deudas y ganar tiempo hasta que la actividad económica les permita facturar a los niveles previos a la crisis”.
Es necesario informarse bien de las condiciones y de los requisitos necesarios para acceder a estas ayudas directas, señala Pedregal. "La tramitación la tiene que hacer cada empresa con su comunidad autónoma. Además, las entidades financieras también ofrecen información y soporte” y pone como ejemplo el simulador de Banco Sabadell en el que las empresas y los autónomos pueden calcular qué ayuda les corresponde y saber a qué cantidad tienen derecho. “También esta herramienta facilita la tramitación de la ayuda", destaca. Asimismo, el director del Segmento de Pymes y Empresas de Banco Sabadell aconseja “informarse bien y estar muy pendientes, porque muchas empresas y autónomos se quedarán fuera y no accederán a estas ayudas tan necesarias por desconocimiento. Es una información vital y que les va a permitir llegar al futuro".
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