¿Dispones de una pequeña cantidad de dinero ahorrada y no sabes qué hacer con ella?
En materia de ahorro existen muchas opciones. Pero hay una que durante años fue la preferida por parte de los ahorradores más conservadores. O desconfiados. Nos referimos a la de guardar el dinero en casa, en vez de invertirlo en algún producto bancario.
En esta infografía te explicamos por qué no es buena idea esconder tu dinero “bajo el colchón”. Y lo hacemos comparando la rentabilidad que obtendrías si eliges esta opción o cualquier otra procedente de una entidad bancaria: cuentas de ahorro, depósitos, etc. Las multas de Hacienda o los accidentes en la vivienda son también poderosos factores que te harán replantear tu idea de ahorro.