La tendencia a la baja en los precios de la vivienda se está reforzando debido a la crisis sanitaria de la COVID-19. Si en el segundo semestre de 2019 ya bajaron un 2,1%, en los primeros seis meses de este ejercicio la contracción se ha incrementado hasta el 4,94%, según datos del ‘XXXI Informe sobre el mercado de la vivienda’, elaborado por Tecnocasa y la Universidad Pompeu Fabra (UPF) de Barcelona. De esta manera, se duplica el ritmo de bajada y el metro cuadrado se sitúa en un precio medio de 2.245 euros. Estos datos se alejan con amplio margen del precio máximo de la serie histórica, que se dio a finales de 2006 y principios de 2007, cuando el metro cuadrado rozó los 3.500 euros. Durante estos 14 años, el precio nominal de la vivienda se ha reducido un 35,8%.
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Por ciudades, Sevilla ha liderado la caída con un retroceso interanual del 8,21% y sitúa el metro cuadrado en 1.252 euros y Barcelona, con una rebaja del 7,21%, en 2.960 euros el metro cuadrado, siendo las dos grandes urbes con más impacto. Pese a la bajada, la Ciudad Condal se mantiene como la más cara de las recogidas en el estudio. Completando el pódium se encuentra Madrid, que ve caer el precio un 4,46%, a 2.573 euros, siendo otra de las más caras.
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La compraventa cae en junio, aunque crece con respecto a mayo
Durante el primer trimestre de 2020, las ventas han bajado un 16%, hasta situarse en 116.045, comparadas con las 138.346 de los tres primeros meses de 2019, aunque hay que tener en cuenta los 18 días de marzo en los que el sector inmobiliario se vio afectado por el estado de alarma. A pesar de ello, los datos del informe muestran una recuperación de la actividad desde mayo, cuando arrancó la desescalada, y sobre todo en junio. Ese mes, las oficinas del grupo inmobiliario Tecnocasa recibieron un volumen de solicitudes de compra similar al de principios de año, superando las 21.000, y también recibieron un número de visitas parecido al previo a la pandemia, de más de 19.000.
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Sin embargo, parece que esto no se ha consolidado, ya que en junio, la compraventa de viviendas se volvió a desplomar, cayendo un 34,3%, y registrándose un total de 27.221 operaciones, según los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE). De esta manera, el sector registra cuatro meses de retrocesos en este tipo de transacciones, ya que en marzo bajaron casi un 19%, en abril un 39% y en mayo casi un 54%. Por tanto, en términos mensuales, la compraventa de viviendas subió en el sexto mes del año casi un 22% respecto al mes anterior.
Quizás una de las fuerzas que ha provocado este interés en la intención de compra es el teletrabajo, una modalidad que ha tenido un gran impulso durante la pandemia y que se ha implementado en muchas compañías, ya que una vivienda de propiedad está más acondicionada para teletrabajar que cuando es de alquiler. Según apunta el Análisis de Fotocasa Research ‘Vivienda y teletrabajo durante la pandemia’, el 57% de los trabajadores que viven en propiedad dispone de una estancia o un despacho separado del resto de la casa, frente al 34% de los inquilinos. Además, en cifras generales, el 74% de las personas que trabaja desde casa vive en una vivienda de la que son dueños. Por todo ello, este grupo de personas que no trabajan desde la oficina puede ser un segmento activo en el mercado inmobiliario, pues suponen el 31% del conjunto de demandantes de vivienda, ya sea de propiedad o de alquiler.
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El incremento en la intención de compra se corresponde con otro aumento, el del número de viviendas en venta. Y es que, tras subir un 19%, se sitúa en junio en 2.774, la mayor cifra de este año. Aunque, en este sentido, también hay que señalar que, a partir de mayo, la cantidad de viviendas que rebajan el precio respecto al marcado inicialmente va en aumento, situándose en 1.767 y, al igual que en el caso anterior, siendo el valor más alto de 2020.